FLUXUS Y ROBERT FILLIOU
En este sentido, dos exposiciones realizadas en torno a la figura de Filliou, examinan por un lado el concepto de Poïpoïdrôme, una mirada a través de la fotografía de Daniel Michel al País Dogon como análisis del metalenguaje universal desarrollado por el autor en Malí. Y una recreación de sus poemas visuales de la mano de Pierre Tilman que con la exposición ¿No ves lo que te digo? articula conceptos como economía poética, y principio de equivalencia. De igual modo se desarrollará un coloquio en el que participaran investigadores como Miguel Molina, Armand Llacer, Bartolomé Ferrando o Mestre, y una serie de mesas redondas y conferencias tratarán de la actualidad de la obra de Filliou y la imprenta del Espíritu Fluxus sobre el Arte de hoy.
El encuentro finaliza con La XIII edición del Festival Nits d’Hielo i Art y un Poï Poïdrôme instalado en el Instituto francés, que estará utilizado por los estudiantes de Bellas Artes de la Universidad haciendo de él una creación permanente, de encuentros, de expresión libre y de intervenciones colectivas. Sin embargo, al replantear cuestiones hereditarias a Fluxus o la idea de “Creación Permanente” analizadas a finales de los sesenta por artistas como Robert Filliou, vemos como éste se adelantaba con la acuñación de conceptos como The Eternal Network, un arte alternativo que pronunciaba el nexo en la comunicación y en la libertad de creación; elaborando una filosofía lúdica sobre el arte y sobre la vida que resumía bien el aforismo "El arte es lo que hace la vida más interesante que el arte". Un arte en comunicación, una trama de relaciones entre los comunicadores, unidos en la red, en el circuito que les permite la interconexión -el "net"-. Y es en este punto donde nos cuestionamos interrogantes como ¿Que consecuencia ha tenido la interacción del arte en la actualidad? ¿No es cierto que la propia deslocalización nos impulsa hacia el desempleo, ante las deslocalización de las empresas? ¿Es aquella máquina representada por Leger sustituida ahora por la energía electromagnética, y la velocidad? ¿Estamos por tanto siendo objeto de nuestra propia manipulación en el Arte? ¿Hablamos de un arte en la resistencia o una manipulación del arte? ¿Un arte escondido tras la red, cuya doble faz arroja sus zarpas en una doble paradoja? ¿Un arte de la performance como única salida? No obstante, nos preguntamos estas cuestiones no solo desde la propia crítica del arte, sino desde la crítica del sistema, de la tecnología y desde como el arte en la resistencia afecta a nuestra contemporaneidad.